La deforestación de la selva maya es un problema que ya se no puede ocultar y es un asunto prioritario que deben atender las próximas autoridades electas para evitar la extinción de las abejas y otros polinizadores importantes para el campo de la Península de Yucatán, afirmaron apicultores de Campeche y Yucatán, integrantes de la Alianza Maya por las Abejas Kaabnaloón.
También existen otras variantes que amenazan a las abejas en la región como son: el uso de plaguicidas como fipronil, que además contamina el agua; la instalación de megaproyectos, apertura de megagranjas porcícolas y avícolas, la ausencia de políticas públicas que protejan a los polinizadores y remedien el daño ambiental, así como sanciones a quienes atentan contra el medio ambiente.
Leydi Aracely Pech Martín, apicultora de Hopelchén, Campeche, afirmó que una exigencia a las autoridades electas es la protección prioritaria de la apicultura, actividad que les genera un fuerte ingreso a la economía local; algunas prohibiciones de plaguicidas y el cambio del uso de suelo, creación de políticas públicas creadas desde el territorio y no del escritorio y la creación de los guardianes de las abejas.
Exigencia, precisó, es porque los tres niveles de gobiernos no hicieron nada para prevenir la deforestación que no sólo acabó con las abejas de apicultores y silvestres, el uso de plaguicidas autorizados por la Comisión Federal de Riesgos Sanitarios (Cofepris) y la omisión y corrupción de las autoridades ambientales por permitir el daño al medio ambiente.
El colectivo se amparó contra las omisiones que favorecieron la deforestación, pero el Juzgado Segundo de Campeche falló en favor de las dependencias gubernamentales. Por lo que la justicia social es una exigencia para los campesinos mayas de la Península.
En materia de política ambiental, este fue el sexenio perdido, pues las autoridades no cumplieron con sus promesas de prohibir el fipronil, alentaron la deforestación, hubo recortes presupuestales para atender los incendios forestales y el programa “Sembrando Vida” no responde al problema u es de tipo asistencialista más que ambiental.