La compañía SpaceX lanzó al espacio desde Florida el cohete reciclable Falcon 9 con una nueva tanda de 52 satélites para su red de internet Starlink, tras encontrar condiciones atmosféricas favorables para la misión.
Además de los satélites para suministrar internet de banda ancha, el cohete llevaba acoplado un satélite de radar Capella Synthetic Aperture (SAR) y otro Tyvak-0130, precisó SpaceX vía Twitter.
Según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOOA), este último es «un nanosatélite de observación astronómica de espectro óptico».
El cohete reutilizable Falcon 9 de dos fases despegó con el paquete de satélites en la punta y luego regresó para posarse sobre la plataforma bautizada como «Of Course I Still Love You» (Por supuesto que todavía te amo).
Esto permite que SpaceX vuelva a utilizar las partes más caras del cohete, lo que a su vez reduce el costo del acceso al espacio, según indica su web.
El de hoy es el tercer cohete Falcon 9 lanzado en las últimas dos semanas, así como la decimoquinta misión de Falcon 9 en lo que va de 2021.
Desde 2010 ha habido al menos 116 lanzamientos de este cohete considerado un «caballo de batalla» de la compañía de Elon Musk, propietario también de los automóviles eléctricos Tesla, y socio de la NASA en el programa para enviar astronautas a la Estación Espacial Internacional en naves comerciales desde suelo estadunidense.
La idea de la compañía de Elon Musk es colocar unos mil 584 satélites del programa Starlink en la órbita terrestre, unos 549 kilómetros por encima de la tierra, una distancia mucho menor que la habitual para estos dispositivos comerciales.
El pasado 4 de mayo la compañía aeroespacial lanzó desde Florida al espacio otra tanda de 60 satélites para su red de internet Starlink.
El programa Starlink ahora ofrece un servicio beta inicial tanto a nivel nacional como internacional y continuará expandiéndose hasta una cobertura casi global del mundo poblado en 2021, explica la web de SpaceX.
Con el envío masivo de satélites de la red Starlink, SpaceX se propone suministrar internet de alta velocidad, constante y «asequible» a usuarios de cualquier lugar del mundo a través de estos satélites que operarán en una órbita baja, lo que permitirá una mejor conexión y servicio.
El jueves pasado, el gigante tecnológico Google anunció haber alcanzado un acuerdo conjunto con SpaceX para proporcionar datos, servicios en la nube y aplicaciones para clientes empresariales de Starlink en ubicaciones de todo el mundo a partir del año en curso.
Asimismo, SpaceX instalará estaciones terrestres dentro de los centros de datos de Google que se conectarán a los satélites Starlink, lo que permitirá servicios de internet rápidos y seguros a través de Google Cloud.
informacion de Milenio