Desde Uxmal, el Gobernador impulsa el bordado maya como símbolo de identidad y motor económico.
El Gobernador Joaquín Díaz Mena presentó el Plan de Salvaguardia del Bordado Maya Yucateco, un proyecto que busca preservar, fortalecer y proteger esta tradición ancestral de las comunidades mayas de Yucatán. Durante el evento realizado en la zona arqueológica de Uxmal, 200 bordadoras de 12 municipios recibieron certificaciones como transmisoras de saberes culturales, destacando su papel en la continuidad de esta manifestación artística y cultural.
Un arte que transforma vidas
El bordado maya yucateco, caracterizado por su riqueza en técnicas —con 34 específicas y múltiples variantes— y su significado histórico, será incluido en el inventario nacional de patrimonio cultural, con la meta de obtener reconocimiento como Patrimonio Intangible de la Humanidad por la UNESCO.
Díaz Mena enfatizó el impacto económico que esta iniciativa busca lograr: «Cada prenda bordada no solo lleva historia, lleva dignidad. Trabajamos para garantizar precios justos, proteger a las artesanas contra el plagio y asegurar que su talento sea reconocido como arte». Asimismo, anunció programas de financiamiento y desarrollo económico para apoyar a las bordadoras.
Colaboración y legado
El proyecto, respaldado por la UNESCO, el INAH, y la Fundación Banorte, incorpora diagnósticos participativos realizados por las propias artesanas, quienes identificaron 168 acciones necesarias para salvaguardar el bordado. Entre estas acciones destacan la formación, promoción y protección del patrimonio cultural. También participaron especialistas como Fidencio Briceño Chel y Elisa Echeverría Chim en los talleres y diagnósticos.
El Plan no solo busca preservar la técnica, sino también promover la equidad de género y el desarrollo comunitario, convirtiendo al bordado en una herramienta de empoderamiento y prosperidad.
Un esfuerzo que une
El evento contó con la participación de titulares de diversas dependencias, como Cultura, Turismo y Fomento Económico, y líderes comunitarios que destacaron el valor del bordado como un símbolo de identidad y una oportunidad para transformar vidas.
Este proyecto marca un paso importante para preservar la herencia cultural de Yucatán, mientras impulsa el desarrollo económico de sus comunidades. El bordado maya, más que una técnica, se erige como un símbolo de identidad y orgullo para el estado.