La pandemia no fue impedimento para que las cafeterías de la entidad bajaran sus cortinas y detuvieran sus ventas. Dicha situación superó las expectativas de los trabajadores de este giro, quienes se tuvieron que modernizar y apostar por el pedido en línea, destacaron baristas de cafeterías ubicadas en el centro histórico.
“Los yucatecos son super amantes del café y prefieren acudir a cafeterías en busca de un cappuccino o tal vez un frappuccino para pasar el rato y tal vez trabajar en su computadora”, comentó Fernando Mex, barista y tostador de la cafetería Caffélatte del rumbo de Itzimná.
Expresó que la pandemia los obligó a reinventarse, esto debido a que la gente seguía buscando un café pero por las restricciones debían prohibir el ingreso a las instalaciones.
Sobre los precios el joven barista indicó que estos se encuentran accesibles al público, pues van desde los $60 a $70 pesos en promedio para cualquier bebida. En el caso de los kilos estos se encuentran entre los $300 a $350, esto porque los granos de café que manejan están más enfocado a las necesidades conforme sus clientes.
Dijo que entre sus productos se encuentran granos de café con esencia floral y un tanto cítrica, así como existen diversas formas de tostado conforme el paladar de los clientes es el precio en el que cotizará.
“Somos una cafetería que lleva trabajando 26 años con el café y somos algo reconocidos a nivel estatal. Compartimos algunos proveedores de grano con algunas otras cafeterías lo que nos ha abierto más puertas y nos ha colocado entre el reconocimiento de los yucatecos”, dijo.