Los especialistas afirman que esta medida además de reducir la violencia doméstica, también contribuye a que se respete las medidas de prevención sanitaria y evita afectaciones a la economía familiar
Integrantes del Comité de Asesoramiento, conformado por los mejores expertos en salud pública y privada de Yucatán, manifestaron su respaldo a la Ley Seca implementada por el Gobierno del Estado ante el aislamiento social dispuesto para reducir los contagios por Coronavirus, ya que aseguran ha demostrado que contribuye a disminuir la violencia doméstica, como lo reportan los informes recientes, pero al mismo tiempo garantiza que se respeten las medidas de prevención como la sana distancia y evita afectaciones en la economía familiar.
En entrevista, el director de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), Carlos Castro Sansores y el médico internista infectólogo, Eusebio Jiménez Ríos afirmaron que esta medida ha demostrado su efectividad ante esta problemática social.
En ese sentido, Castro Sansores, médico internista egresado de la máxima casa de estudios en el estado, explicó que es una buena medida que se debe seguir aplicando por diversos motivos, ya que como el alcoholismo es un problema que se da sobre todo en el interior del estado y que normalmente el consumo va ligado a la organización de reuniones, eso rompería con la sana distancia y el aislamiento, además que también está comprobado que los índices de violencia familiar incrementan con el consumo.
El especialista comentó que el Coronavirus es una pandemia que debe tomarse con total seriedad y deben seguirse todas las recomendaciones para evitar que el sistema de salud se vea rebasado en su capacidad.
Asimismo, el médico internista refirió que, si bien es cierto que el Gobierno del Estado está haciendo un esfuerzo extra para otorgar apoyos económicos a las personas que más lo necesitan, esto sería en vano al levantar la Ley Seca porque la mayoría de las personas utilizarían este dinero para la compra de bebidas alcohólicas.
“El Gobierno del Estado está haciendo su parte para ayudar a la gente que no tiene recursos y no tiene trabajo y se les están dando dinero para subsistir y varios lo utilizarían para comprar alcohol, por eso es una medida prudente que debe mantenerse”, puntualizó.
Por su parte, el médico internista infectológo, Eusebio Jiménez Ríos, aseguró que suspender la venta de alcohol evita que se originen reuniones, lo que contribuye a no complicar más el confinamiento que, de por sí, ya es muy difícil.
«Hay que evitar que la armonía se rompa, considero que es una medida acertada y hay que verlo en muchos entornos. De haber venta, ahora que los ingresos son menos, el impacto sería en la economía familiar. Los que analizaron está Ley, tuvieron que valorar muchos aspectos para tomar la decisión, no es nada más una ocurrencia», afirmó.