Por falta de sensibilidad de los diputados panistas, la Ley de Prevención del Suicidio en Yucatán ya no está en la congeladora legislativa; creo, ya la enterraron, opinó el diputado perredista Eduardo Sobrino Sierra, promovente de la iniciativa.
El pasado 1 de septiembre de 2022, durante los asuntos generales, el congresista exhortó a las demás fuerzas políticas para que se trabaje en comisiones la Ley de Prevención del Suicidio para el Estado de Yucatán. “Cada día siguen suicidándose mujeres y hombres en nuestro Estado; no tiene que ser esta iniciativa, estamos abiertos a nuevas propuestas”, expresó en aquella ocasión.
“La salud es un derecho constitucional y la salud mental es parte de un derecho constitucional. Por eso mi iniciativa debe descongelarse y aprobarse porque plantea crear una cultura de prevención del suicidio en Yucatán, uno de los estados con mayor número de suicidios en país”, exhortó.
“Nosotros queremos que se genere una política preventiva de manera interseccional para que, socialmente, se detecten los puntos en donde el suicidio se pudiera incrementar, así como concienciar a los medios informativos para que informen de esos hechos sin amarillismos”, comentó el diputado perredista.
Sobrino Sierra precisó que la iniciativa social que presentó va más allá de que la entidad cuente con el presupuesto para entender dicho problema, la infraestructura médica y el personal especializado en salud mental. “Es necesario generar una campaña cultural, formativa, para que las enfermedades mentales requieren de atención como todas las demás”, expresó.
“El suicidio es una enfermedad en la que todos debemos enfocarnos para prevenirlo, y las personas con problemas no deberían tener vergüenza para pedir la atención psicológica y psiquiátrica, pues en caso de no atenderlas estás creando las condiciones para que se orillen al suicidio. Con la atención, se encuentran estables tanto emocional como medicamente”, mencionó.
“El asunto de fondo con el suicido es la presencia de problemas psiquiátricos y psicológicos que no son atendidos. En muchos casos, los propensos al suicidio avisan, dan síntomas y expresan esas ideas que no son atendidos por la falta de conocimiento y cultura”, comentó.
“Esta enfermedad debe atenderse como cualquier otro malestar. Por ejemplo, un cáncer que se manifiesta con síntomas, pero el paciente al no atenderse la neoplasia hace metástasis hasta que el paciente no tiene remedio y se muere”, abundó.
También señaló que los pacientes con enfermedades mentales requieren de atención psicológica y psiquiátrica. “Muchos médicos no estudian esa especialización porque los pacientes no recurren para atenderse. ¿Cuándo se recurre con el psiquiatra? Cuando el paciente ya está insoportable, cuando la situación es difícil de atender. Soy muy pocas las personas que cuando sienten algún síntoma de enfermedad mental, recurren al médico”, dijo.
“El psiquiatra es necesario para detectar un problema de salud mental que se pueda corregir. Posiblemente, el paciente presenta un problema de falta de litio o depresión, que con el acompañamiento del psicólogo y con el antidepresivo que le receta el médico psiquiatra se estabiliza se puede superar ese problema”, ejemplificó.
El congresista comentó que la atención psicológica y psiquiátrica debería verse tan necesaria como consultar con un dentista, pero lamentablemente la sociedad yucateca carece de una cultura de atención a la salud mental.
“Esos prejuicios, hacia quienes acuden al psicólogo y/o psiquiatra, deberían erradicarse desde las infancias. Es las escuelas deberían enseñarse que la salud mental necesita atenderse como si de un malestar físico se tratara”, señaló.