Transcurrieron 24 horas en la que representantes regionales de la Sección 33 del SNTE instalaron guardias en las oficinas para dialogar de frente con BJ Emanuel González Chávez como secretario general, pero “no ha tenido la sensibilidad de presentarse o llamarlos vía telefónica. Requerimos que el secretario se presente y dialogue con nosotros”.
Profesores inconformes por su gestión, dieron a conocer que continuarán con la vigilancia, se turnarán por horarios hasta conseguir el diálogo con el dirigente, de quien desconocen el parado. Desde el pasado 4 de junio, cuando unos cinco mil agremiados tomaron las instalaciones del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) para entregarle el pliego petitorio y solicitar un diálogo directo, González Chávez ha dado evasivas a los agremiados.
El desinterés del dirigente va más allá de falta del diálogo con la base trabajadora. “Hubo cambios geográficos y asignación de horas, pero él siempre ha estado ausente”, dijo Genny Hernández, quien labora en la Secundaria Técnica 76 “Los Héroes”.
Pese a las intimidaciones que reciben, los representantes regionales continuarán en el local, al que consideran su hogar porque se construyó y se mantiene gracias a las aportaciones de los agremiados. “Entran, nos apagan el clima, nos toman fotografías y tienen actitudes descorteses.
“Pero, esta es nuestra casa, pues cuando ganamos nuestra base enseguida nos descuentan las cuotas del Sindicato de nuestra nómina. Durante 17 años, en mi caso, he contribuido a este lugar”, señaló la docente.
“Somos parte de la base trabajadora, a la que dicen defender. Nosotros no hacemos nada ilegal, sólo buscamos que haya apertura al diálogo con él, pues ha habido una nula presencia sindical y ellos son personalidades de pantalla. Por ejemplo, cuando hacen cambios geográficos, la autoridad educativa les dice que son observadores”, expresó.
También acusaron al dirigente y su comitiva de ausentarse y no hacer nada por mejorar la calidad de vida de sus agremiados, pues las instalaciones son desaprovechadas en comparación con otros sindicados cuyas instalaciones cuentan con actividades culturales y deportivas.
En un año al frente del SNTE, González Chávez no ha hecho nada por la Sección 33. “Fue electo, pese algunas personas, por tres años en un proceso en el que la mayoría de los sindicalizados decidieron ausentarse en las urnas”, concluyó.