El cáncer de próstata ocupa el primer lugar de mortalidad por cáncer en la población masculina mexicana, en gran medida por falta de un trabajo coordinado y constante de prevención, detección y atención por las autoridades de salud.
La atención integral y homologada del cáncer de próstata es una deuda pendiente con los pacientes que enfrentan la enfermedad, también, con todos los hombres que potencialmente pudieran desarrollar ese tipo de padecimiento, porque se estima que en el país 7 de cada 10 varones son diagnosticados cuando el cáncer se encuentra en etapas avanzadas, limitando el pronóstico de recuperación, manifestó la Coordinadora del Movimiento Latinoamericano contra el Cáncer de Próstata, Leticia Aguiar Green.
Además, la pandemia desencadenó incertidumbre entre los pacientes porque algunos hospitales suspendieron o aplazaron las terapias y servicios debido a que dieron prioridad a los casos de COVID-19, por eso, es necesario que todos los servicios de salud pública garanticen la atención y el acceso a tratamientos de calidad en cualquier región del país, abundó
Por su parte, el Urólogo Hugo Manzanilla García manifestó que en sus primeras etapas el cáncer de próstata es discreto y podría no presentar síntomas, por eso, los varones mayores de 45 años deben acudir al médico para realizarse la prueba del antígeno prostático específico y el tacto rectal, pues si se logra identificar el cáncer de próstata en etapas tempranas sería 100% curable.
Uno de los principales factores de riesgo es determinado por la edad, pues la probabilidad de desarrollar cáncer de próstata aumenta considerablemente a partir de los 50 años y 6 de cada 10 casos son detectados en hombres mayores de 65, comentó el especialista.
Pidió a los hombres mantenerse atentos y acudir con un especialista ante la presencia de signos y síntomas como dificultad para orinar, cambios en el flujo y frecuencia de la orina, problemas de erección, presencia de sangre en semen u orina; en etapas avanzadas dolor o fracturas en huesos, disminución de la fuerza en piernas y pies, hinchazón en piernas o pelvis, así como incontinencia urinaria.