A pesar de las maestrías o doctorados del personal de salud, no le dan la importancia al lavado de manos
La presidenta de la Asociación Mexicana de Profesionales en Esterilización, Sandra Fabiola Casas Ramírez, exhortó a los empleos de los sistemas de salud a adoptar el hábito de lavarse las manos “siempre, antes y después de tocar a los pacientes, antes y después de tocar objetos que le pertenecen al paciente, al llegar al trabajo y antes de irse, porque también llevamos microorganismos del hospital a la calle y a la casa”.
La especialista señaló que hoy día los trabajadores de la salud podrán maestrías o doctorados, pero ni así le dan importancia al lavado de manos, aseguró.
“Creo que lo importante no es alcanzar mayores niveles educativos, sino adoptar mejores hábitos y entender que la seguridad del paciente es fundamental y que una infección asociada a la atención de la salud está hablando de mala calidad de la atención”, precisó.
Llamó al personal de sanidad a no tomar a la ligera sus consejos. «Lavarse las manos debe ser un hábito cotidiano, mientras más rápido entendamos eso, más seguros estarán nuestros pacientes», dijo.
Sandra Casas dio a conocer que cada hora mueren 100 pacientes en el mundo por infecciones asociadas a la atención de la salud.
“Esos son los datos que registra la Organización Mundial de la Salud, pero esas infecciones pueden ser prevenibles”, expuso la licenciada en Enfermería egresada de la Universidad Autónoma de México (UAM).
La acción más importante para prevenir infecciones intrahospitalarias es el lavado de manos, dijo.
“Es una acción sencilla, económica, que se debe incorporar como hábito de trabajo para todos los profesionales de la salud, desde médicos, enfermeras, terapeutas, psicólogos hasta la recepcionista y el vigilante”, recordó.
«Todo el mundo debe lavarse las manos, porque es la única manera de eliminar los microorganismos en uno de los mecanismos más comunes de transmisión que es el contacto a través de las manos y las superficies», explicó.
También consideró que el problema de no lavarse las manos es una cuestión cultural, de adaptación a las normas, estándares y reglas.
Otro problema en Latinoamérica y México “es que no hay un registro adecuado de las infecciones, es decir se trabaja con un sub-registro que indica que de 10 casos a veces no se reportan ni dos, porque están mal identificadas o porque los hospitales no quieren evidenciar que ese problema existe en sus instituciones y, además, si evidencian el problema estarían hablando de una mala calidad en la gestión de los procesos”.