El descarrilamiento del trenecito en el Parque Zoológico del Centenario, registrado este fin de semana, se debió un fallo de la locomotora. El tren no tuvo problemas, afirmó el Director de Servicios Públicos Municipales, José Enrique Collado Soberanis.
De acuerdo con el entrevistado, el problema se registró en la “nariz de la locomotora”, por lo que una varilla se dobló, rompió el cárter, tiró el aceite, una de las llantas falló y sólo la locomotora se descompuso.
Debido a que existen tres trenes en existencia, la unidad averiada fue llevada a reparación y se colocó otro para que dieran el servicio este fin de semana, que coincidió con el cierre de las vacaciones de verano, explicó el funcionario municipal.
“Eran dos unidades que se les dio una reparación y se mandó a construir una nueva. Lo sucedido fue un accidente, quizá por el movimiento se zafó esa pieza”, detalló Collado Soberanis. Por cierto, descartó pasajeros y empleados lesionados por descarrilamiento.
La falla no generó ninguna afectación masiva en los recorridos del tren, ya que se retiró uno para instalar el otro de repuesto. “Entre semana funciona un tren; los viernes, sábado y domingo, funcionan dos trenes dando vueltas y es rápida la afluencia. No podemos poner los tres, porque no da el tiempo”, precisó.
En otro tema, los zoológicos de Mérida recibieron en los dos últimos fines de semana 326 mil visitantes. “Tuvimos poco más de la media que era 120 mil o 140 mil, llegamos a casi 150 mil. Ya podemos decir, que sobrepasamos los números obtenidos antes de la pandemia”, dijo.