Por los apagones, las empresas no pueden parar ni un solo minuto, porque se pierde productividad y dejamos de cumplir compromisos con proveedores, comentó el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Mérida, Emilio Blanco del Villar, quien exigió acciones urgentes para solucionar este problema.
“Necesitamos sentarnos con las autoridades para construir y diseñar el modelo de energía que queremos para el futuro y cómo evitar ese tipo de problemas”, mencionó el dirigente patronal, quien descartó promover alguna demanda por las pérdidas económicas generadas por estas variaciones en el servicio de electricidad.
A través del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) Yucatán, los dirigentes de las 27 cámaras empresariales solicitaron una reunión con los responsables de la Comisión Federal del Electricidad (CFE), pero todavía están a la espera de una respuesta.
Aunque es complicado calcular las pérdidas económicas por estas variaciones de electricidad, el empresario aseguró que el daño es muy fuerte. “No tengo un censo de cuántas empresas han sido perjudicadas. Pero, por lo menos, el 50% ha tenido algún paro de actividades por la falta de energía”, señaló.
Blanco del Villar mencionó que una exigencia a las autoridades es que la infraestructura cumpla con las necesidades. “Desde hace seis años llevamos necesidad de inversión. Tal vez la situación sea inédita (en este año), pero esperamos que no se repita en el futuro”, dijo.
“Creo, las inversiones en las plantas de ciclo combinado serán un aliado estratégico para Yucatán y para la generación de energías para el futuro, así como las inversiones en el gaseoducto para que llegue el gas natural”, aseveró. “Para finales de julio arrancarán las pruebas de la primera de ellas”, adelantó.
Al cuestionarle si estos apagones son consecuencia de las altas temperaturas y la eliminación del horario de verano, el empresario comentó: “El cambio climático no es un pretexto para que la energía no fluya como debe de ser. Si se hacen las inversiones correctas en infraestructura, aunque hubiera 100 grados no sería insufrible ni deberíamos tener fallas”, abundó.
De la falta del horario de verano, indicó: “Tal vez tuvo una afectación. Pero si los países desarrollados han hecho cambio en los horarios para mejorar y aprovechar los consumos de energía, creo que deberíamos de replicar los modelos y no inventar el hilo negro”.