En plena contingencia del Coronavirus la comisaria ejidal de la hacienda Opichén está buscando como quitar a los comerciantes de alimentos del parque principal y es que sin importarle que es el sustento de las familias que esperan la pandemia pase, insiste en que sus locales solo dan mala imagen a la comunidad, hoy a la señora, María hermenegilda Pech intentaron desarmarle su puesto, pero gracias a su permiso que el Ayuntamiento de Mérida fue que los inspectores no pudieron.
La situación irritó a los vecinos quienes rechazaron la acción ya que cuando la contingencia finalice todos serán los que salgan a trabajar para recuperar las perdidas y aseguraron no ser buen momento para desalojos.
Los reporteros acudimos a pedirle su versión a la comisaria, pero no quiso hablar, eso sí una de sus colaboradoras portando una camisa del Ayuntamiento de Mérida se dirigió a gritos y señas obscenas para evitar que se grabaran y fotografiaran imágenes.