La producción local no es suficiente, por lo que se importa de Brasil. Ante ese panorama, Tejidos Sisal exhortó a los productores a no vender sus lotes y que se acerquen para firmar contratos de compra con la garantía que se les pagará lo producido a un precio superior
Con el propósito de revivir la industria henequenera en Yucatán, Sisal Tejidos llamó a los productores locales a no vender sus terrenos para desarrollo inmobiliarios y acercarse para firmar contratos de compra, con la garantía de que se les adquirirá toda la producción a un precio superior del mercado nacional.
El director ejecutivo de Sisal Tejidos, Nerio Torres Arcila, comentó que la producción local no es suficiente para producir las alfombras, por ello tienen que importar fibras brasileñas en las que se invierten cantidades cuantiosas de dinero.
«Estamos dispuestos a pagar lo mismo que pagaríamos en Brasil con todo flete marítimo, que es demasiado caro después de la pandemia, la obstrucción del Canal de Suez y el conflicto entre Ucrania y Rusia, todo eso ha hecho que el combustible incremente su precio», señaló.
El ejecutivo precisó: «No pretendemos ahorrarnos dinero al comprar fibra yucateca, sino que pagaremos lo mismo por la fibra que se importa. Esto generará un beneficio a los productores».
Durante la época del Oro Verde, en Yucatán se sembraron 120 mil hectáreas de las cuales hoy día sólo producen cuatro mil que, a su vez, resultan insuficiente cubrir la demanda de Tejidos Sisal y por ello se importa fibras de Brasil.
Torres Arcila pidió a los productores locales de henequén no vender sus predios para lotificar, pues hay una esperanza para producir esa planta que, a diferencia de otras especies, puede crecer entre las piedras y no necesita sistema de riego.
En la reunión que sostuvieron varios empresarios con el secretario de gobernación, Adán Augusto López Hernández, se le propondría de nuevo que en el Programa Sembrando Vida se incluya cultivar el henequén en vez de maderas preciosas o cítricos, que difícilmente crecerán por las condiciones del suelo, comentó el presidente del Consejo Agroalimentario de Yucatán.
«Nuestra tierra tiene vocación de henequén, démosle henequén a la gente. Nosotros seremos quienes les compremos toda su vocación para beneficio de ellos y toda su familia», concluyó.