El pasado fin de semana se desató una polémica en las redes sociales al ser denunciada una boda religiosa en el municipio de Ticul, en la imagen que circuló se aprecia a la pareja de novios y las damas.
Y aunque algunas versiones señalan que tenían cubre bocas, las personas se extrañaron ya que aún no abren las iglesias en el Estado de Yucatán, sino hasta la ola tres, y de acuerdo a lo que marque el semáforo en la entidad.
Ante esto, el Padre Jorge Martínez Ruz, de la Pastoral de Comunicación de la Arquidiócesis de Yucatán explicó que esta celebración religiosa es la única que se podría llevar a cabo durante la contingencia sanitaria, solo con 10 personas y por causas extremas: “Se le ha dado la opción de celebrarlo con un número aproximado de 10 personas o cambiar la fecha, muchas personas no han podido posponer la fecha por diferentes motivos, económica, viaje, mudanzas, y otras razones y han preferido celebrar la boda con un grupo pequeño a dejarlo pasar más y esto ha ayudado a que valoren más el sacramento y de la celebración como tal”.
El Padre Jorge reiteró que exhortan a estas personas que al contraer matrimonio, no se debe de realizar celebración alguna, sin embargo esto queda fuera de su alcance: “Nosotros exhortamos a que no haya fiestas y reuniones, pero no podemos contralar si la gente festeja o no, independientemente si tiene un festejo o no, no está en nuestras manos, la gente que haga caso guardará su sana distancia y las normas, y a gente que no obedezca hará caso omiso a las normas de sanidad, nosotros estamos promoviendo incansablemente que se sigan las normas y que se respete todo y en el caso del culto privado que se siga con estas disposiciones” .