Existen muchos retos en materia de Derechos Humanos, uno de ellos que las mujeres sordas puedan tener la accesibilidad a la comunicación, pues requieren más intérpretes de lenguaje de señas, así como personal de las dependencias gubernamentales que puedan entenderlo, señaló la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (Codhey), María Guadalupe Méndez Correa.
La entidad no cuenta con un censo que permita saber cuántas personas con alguna discapacidad existen en la entidad, lo cual hace aún más trabajoso el realizar alguna política pública para cubrir todas las necesidades de este grupo en especial, aseguró.
En el caso de las personas con hipoacusia, la Ombudsperson mencionó que en México unas 800 mil personas viven con dicha discapacidad, pero se desconoce cuántas hay en Yucatán, por lo que se requiere la realización de algún censo a nivel estatal, no solo para conocer cuántas personas sordas hay en la entidad, “sino cuántas personas con las diferentes discapacidades viven en el estado”.
La falta de accesibilidad a la información para las personas sordas puede considerarse una violación a los derechos humanos, recordó. Es por ello que, desde ahora, están gestionando la difusión de la lengua de señas y trabajar en la profesionalización de la misma, señaló.
La Codhey firmó un convenio con la Comisión de Derechos Humanos de Campeche, que cuenta con un Instituto, que se ha ofrecido a capacitarlos para profesionalizarlos y ser un ente calificador de quienes manejen el lenguaje de señas, dio a conocer Guadalupe Méndez.
Actualmente, la Codhey tiene intérpretes en el lenguaje de señas mexicanas. Pero, la intención es capacitar al personal de primer contacto y en general para que puedan fungir como puente de comunicación, aseveró.
En la difusión y el respeto a los Derechos Humanos siempre hay pendientes por hacer, comentó la Ombudsperson, quien reafirmó su compromiso con los temas de inclusión, género, igualdad y de construir, desde la sociedad civil, una agenda de derechos humanos.