Fruto del trabajo solidario entre el Ayuntamiento de Mérida, sociedad civil e instituciones religiosas
Los tiempos difíciles que vivimos derivados de la pandemia mundial del COVID-19 siguen demostrando que en Mérida sociedad y gobierno sabemos trabajar de la mano de manera solidaria y sin diferencias a favor de la población más vulnerable, afirmó el alcalde Renán Barrera Concha.
Subrayó que ejemplo de ese trabajo solidario fue la entrega de láminas galvanizadas que donaron el Club Rotario de Mérida, la Iglesia Metodista Cristiana perteneciente a la comunidad coreana y la Fundación Bepensa, a lo que se sumaron los cubrebocas entregados por la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Estos apoyos beneficiaron a 14 familias del asentamiento irregular de la colonia San Luis Sur Dzununcán y a otras más de zonas aledañas.
La entrega se realizó el pasado martes 11 con apoyo de personal de la dirección de Desarrollo Social, a cargo de su titular, José Luis Martínez Semerena, a quien acompañaron también César Manuel Gordillo Mena, presidente del Club Rotario de Mérida y voluntarios de esa agrupación; pastor Sung Jei Oh, de la Iglesia Metodista Cristiana; Gina Dogre, coordinadora del Comedor de la Virgencita del Árbol perteneciente a la comunidad de San Luis Sur Dzununcán y Haron Rosado, representante de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días de la zona de Itzimná.
El Club Rotario de Mérida hizo acopio de láminas por medio de donativos particulares y de la Fundación Bepensa, que duplicó lo recaudado.
Por su parte, la Iglesia Metodista Cristiana donó 3,000 dólares para adquirir más láminas galvanizadas que permitirán a las familias beneficiadas techar sus viviendas, la mayoría de cartón y otros materiales endebles.
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días aportó 1,030 cubrebocas que fueron elaborados y donados por la agrupación Sociedad del Socorro, que reúne a mujeres de esa iglesia a partir de los 18 años para hacer actividades en bien de su comunidad y de los más necesitados.
Se entregaron 10 cubrebocas a cada una de las familias beneficiadas con láminas y 250 al comedor del asentamiento irregular. El saldo se destinará a asociaciones que trabajan con personas con discapacidad.
Doña Clara Chi, de 62 años y su esposo Francisco Gamboa, de 64, quienes viven solos en el citado asentamiento desde hace cuatro años, externaron su agradecimiento por el apoyo del Ayuntamiento y las asociaciones que les permitirán habitar un espacio más digno.
—En estos tiempos difíciles de la pandemia y principalmente por nuestra edad ya no encontramos trabajo —comentó don Francisco.
Señaló que con las láminas recibidas techarán la cocina de su vivienda, por la que entra el agua cuando llueve.
Por su parte, el director Martínez Semerena explicó que el asentamiento irregular ubicado en San Luis Sur Dzununcán ya tiene un avance del 95 por ciento de trazos definitivos por parte del IVEY para regularizarlo, lo que permitirá al Ayuntamiento de Mérida dotarlo de servicios básicos en beneficio de unas 200 familias que hoy lo habitan.
—El alcalde nos ha instruido a trabajar para dotar de infraestructura a estos asentamientos, de manera que se incorporen plenamente a la ciudad y ya estamos muy avanzados en esta zona en las labores para la electrificación, dotación de agua potable y pavimentación.
Finalmente, el funcionario agradeció el apoyo de las fundaciones, asociaciones e iglesias participantes en la actividad, que se sumaron a estas labores ante las afectaciones que dejó la tormenta “Cristóbal” donando ropa, lonas y láminas para las familias cuyas viviendas resultaron más afectadas.
—Este apoyo es resultado de la suma de esfuerzos y ése es precisamente el objetivo de nuestra área de Vinculación con Organismos Sociales, por medio de la cual tomamos nota de las necesidades de la comunidad y les canalizamos el apoyo de las empresas y ciudadanos que colaboran en esta noble causa —puntualizó.