La entrega de estos aparatos médicos forma parte del proceso de reconversión hospitalaria que se implementa en el estado
Las 110 unidades de asistencia respiratoria, mejor conocidos como ventiladores, que el Gobierno del Estado adquirió de manera anticipada ante la escasez mundial de estos equipos por la pandemia del Coronavirus comenzaron a distribuirse en los hospitales públicos estatales, como parte del proceso de reconversión hospitalaria que dispuso el Gobernador Mauricio Vila Dosal.
Hay que recordar que, como medida de prevención, ante un crecimiento mayor del número de contagios en Yucatán debido al avance de esta pandemia, Vila Dosal informó sobre la implementación de este procedimiento, que permitirá ampliar las áreas y camas exclusivamente habilitadas para atender a personas contagiadas y que requieran hospitalización, así como para aumentar el número de unidades de cuidados intensivos para pacientes más graves, en donde estos equipos serán muy necesarios.
En esta semana, se distribuyeron 20 ventiladores al Hospital Regional de Alta Especialidad de la Península de Yucatán (HRAEPY), 18 al Hospital General “Dr. Agustín O´Horán”, 13 para el Hospital General de Valladolid y 5 para el hospital San Carlos de Tizimín. De acuerdo con lo programado, se estima que esta semana se hagan llegar 5 de estos dispositivos al Hospital General de Tekax.
Al respecto, la directora del Hospital General de Valladolid, Lorena Barrada Rodríguez, señaló que estos equipos vienen a complementar el proceso de reconversión hospitalaria que se implementa en este hospital, el cual permite tener un área específica para aislar a los pacientes sospechosos o confirmados de Coronavirus del resto de los demás y ofrecer una atención integral con las medidas de protección necesarias para todo el personal.
“Los ventiladores soy muy necesarios para el manejo y estabilización de pacientes sospechosos o con Coronavirus que presenten complicaciones para respirar y lleguen a las áreas de reconversión, además esto nos permitirá evitar los traslados a Mérida al ofrecer atención a las personas en sus propias localidades”, precisó la doctora.
Barradas Rodríguez recordó que al contar con toda esta infraestructura además de atender a los pacientes con todo lo necesario, también se evita que los familiares tengan que hacer gastos, pues al no tenerlos que llevar a Mérida y ser atendidos en su propia localidad, ya no tienen que viajar y sacar de sus bolsillos para pagar comida y estancia en la capital yucateca.
“Es más fácil que estando en su localidad puedan ir a sus casas y si necesitan hacer trámites o diligencias la distancia es mucho más corta al venir al hospital que ir hasta la ciudad de Mérida. Con estos equipos que se nos dotó y con el personal capacitado con el que contamos podemos dar la atención médica exactamente igual que se les da en Mérida”, comentó la directora del Hospital General de Valladolid.
A su vez, Margarita Díaz Basilio, directora del Hospital San Carlos de Tizimín, refirió que los ventiladores van a ser de mucha utilidad en esta fase de la contingencia para dar respuesta a la atención de los pacientes que requieran ser hospitalizados a causa del Coronavirus, pues vienen a complementar todo el esfuerzo realizado en materia de reconversión hospitalaria.
“Nosotros ya contamos con un área aislada del hospital para tener una menor contaminación y evitar contagios al resto de la población. El hospital San Carlos brinda servicio a 8 municipios circunvecinos a Tizimín, así que contamos con el equipo, material y recurso humano para las personas que lo requieran”, aseveró la directiva.
Díaz Basilio y Barradas Rodríguez resaltaron las acciones de prevención implementadas por el Gobierno del Estado y respaldadas por la sociedad para evitar que se disparen los casos de Coronavirus como en otros lugares y que hicieron colapsar los hospitales, por lo que llamaros a la población a continuar con las medidas de contención como permanecer en sus casas, seguir con los hábitos de higiene básica, el distanciamiento social y el uso de cubrebocas en lugares públicos, para que juntos salgamos adelante.
Cabe mencionar que, las 110 unidades de asistencia respiratoria, también conocidas como respiradores o ventiladores, fueron adquiridas por iniciativa del Gobernador Mauricio Vila Dosal, como parte de las medidas tomadas de manera anticipada ante la escasez del producto, no sólo en México sino a nivel mundial, ante la contingencia por el Coronavirus, las cuales vienen a sumarse a los equipos de este tipo con los que se cuenta en diversos hospitales del estado.
Previendo que estos aparatos iban a tener una alta demanda y por lo tanto podría existir desabasto en el mercado, el Gobierno del Estado decidió, desde semanas atrás, conseguir todos estos equipos médicos, entre los que se encuentran tanto para uso hospitalario como ambulatorio, los cuales son de última generación. Todos serán distribuidos en los principales hospitales públicos que están a cargo de la Secretaría de Salud de Yucatán (SSY).
Con ellos, se puede ofrecer atención a pacientes con Coronavirus que lo requieran, así como quienes padezcan alguna otra Enfermedad Respiratoria Aguda (ERA), de forma computarizada, debido a que se trata de un aparato de alta tecnología.
También el Gobierno del Estado adquirió 69 monitores de signos vitales con tecnología de punta para dotar a los hospitales públicos estatales en todo el territorio ante la contingencia por el Coronavirus.
Estos dispositivos se utilizan para medir los parámetros fisiológicos básicos y poder notificar a los médicos de cualquier cambio en las condiciones del paciente. A través de estos instrumentos, se puede conocer de manera más exacta las condiciones del paciente mediante el monitoreo y mediciones más precisas de sus niveles, tales como la presión arterial, los latidos del corazón y la cantidad de oxígeno que hay en su cuerpo.
La SSY indicó que, por disposición de Vila Dosal, fueron adquiridos los modernos dispositivos con recursos estatales, y son indispensables para los pacientes que requieren de soporte respiratorio, ya que son programables y se adecúan a los requerimientos hospitalarios de cada persona.