El regidor Óscar Medina Cruz consideró que el Fideicomiso del Sistema Individual para el Retiro y Jubilación Municipal (Sirjum) nunca debieron entregarse a Bursamétrica S.A. de C.V., y ahora unos 340 millones están en riesgo de perderse.
“Se decidió cambiar de un banco, Citibanamex, a una casa de bolsa porque dicha firma estaba cerrando su ciclo con los fideicomisos, pero no sucedió y podía durar tres, cuatro, cinco años. Hoy día, todavía sigue y se cambió a una casa de bolsa, que no está inscrita en el Instituto de Protección al Ahorro Bancario (IPAB) y los recursos no están protegidos para que, en algún caso de pérdida, sea el estado que los devuelva”, señaló.
“En aquella sesión de Cabildo, del 28 de enero de 2022, fui muy claro que no se debió abrirse ese tema, porque los mercados son volátiles”, recordó.
Actualmente, el Fideicomiso tiene mil 287 millones de pesos, de los cuales el 34% está invertido en documentos que no pueden tener buen origen y el 66% en papeles de gobierno. Esto es con información del Comité del Sirjum, señaló el edil.
Un aproximado de 340 millones de pesos del Fideicomiso del Sistema Individual para el Retiro y Jubilación Municipal (Sirjum) están en peligro, porque es el 34% porcentaje invertido en documentos privados por Bursamétrica y el otro 66%, en documentos de gobierno. Ese perjuicio no lo veremos hasta 2025 y 2028, cuando vencen los documentos, afirmó.
Inversiones peligrosas
“Esta empresa realizó inversiones muy peligrosas con el Fideicomiso del Sistema Individual para el Retiro y Jubilación Municipal (Sirjum)”, aseveró el munícipe, quien tras revisar el contrato de Bursamétrica, aprobado por la mayoría panista del Cabildo 2018-2021, la empresa “puede invertir donde quiera sin tener responsabilidad alguna del menoscabo de los valores. Es una forma de liberarse”, comentó.
“Esta empresa realizó inversiones muy peligrosas con el Fideicomiso del Sistema Individual para el Retiro y Jubilación Municipal (Sirjum)”, aseveró el munícipe, quien tras revisar el contrato de Bursamétrica, aprobado por la mayoría panista del Cabildo 2018-2021, la empresa “puede invertir donde quiera sin tener responsabilidad alguna del menoscabo de los valores. Es una forma de liberarse”.
Lo peor, advirtió, es que, si se toman acciones legales contra Bursamétrica, según el contrato, “el Fiduciario estará facultado para retener patrimonio hasta que haya una sentencia final y definitiva. Es decir, si el Ayuntamiento presenta una demanda por estos daños, quien se quedará, provisionalmente, con los recursos de los trabajadores es Bursamétrica.
“Y si es un litigio como el de las lámparas, que duró casi 14 años, en ese tiempo estará el recurso de los trabajadores en posición de Bursamétrica. Quien vaya a emprender las acciones legales tiene que conocer todas estas consecuencias que están en su contrato y sin haber revisado cuidadosamente las condiciones con las que se firmó”, advirtió.
Cerrarle la llave a Bursamétrica
La modificación al contrato, aprobado por unanimidad en el Cabildo de Mérida en la Sesión Extraordinaria de ayer miércoles, tuvo por objetivo para “cerrarle la llave a Bursamétrica” para que los fondos se inviertan en valores gubernamentales de renta fija en pesos.
“Esto fue una medida de emergencia de reacción para frenar las inversiones que se pudieron seguir haciendo, que afecten el patrimonio de los empleados del Ayuntamiento de Mérida. Lo invertido, ya es un tema pasado”, aseguró.