- Los compradores encontrarán todo para su altar y elaborar sus pibes a precios de mayoristas y menudeo.
La Central de Abasto de Mérida está lista para recibir a los compradores que repuntarán en este último trimestre del año con motivo de las celebraciones del Día de Muertos y navidades, pues hay abarrotes, frutas, verduras y cárnicos, afirmó la directora de la paramunicipal Nora Argelia Pérez Pech.
-En estos meses, los alimentos incrementan por la llegada de cítricos como la toronja, el limón yucateco, la naranja dulce, la mandarina que son productos locales –comentó. De las nueve mil toneladas que tememos en tiempos normales, para el cierre de año se incrementan de 11 mil a 12 mil toneladas.
Para la temporada del Janal Pixán, los compradores al menudeo y mayoreo podrán encontrar jícamas, calabazas locales y castilla, así como flores, dulces típicos y todos los ingredientes para la elaboración de los pibes y otras comidas típicas de las celebraciones de nuestros difuntos.
“Tenemos la oportunidad que puedan varias los precios, comprar algunos productos a precio de mayoreo y otros, a menudeo. En esta temporada, los locatarios tienen la tradición de vender en el área del estacionamiento de 4 de la mañana hasta 9 de la noche”, precisó.
Nora Pérez aseguró que en los últimos cinco años ha cambiado la percepción de la Central, donde se pueden adquirir verduras, frutas y productos a menudeo, pues anteriormente los locales sólo vendían a compradores mayoristas como hoteles, restaurantes o supermercados.
“Hoy día hay un entendimiento que para no ir al Centro o no cruzar la ciudad, necesitas espacios para poder comprar al menudeo. En la Central de Abasto hay una nave exclusiva para comprar al menudeo, vemos gente que realiza su compra diaria o semanal, los restaurantes pequeños, fruterías o quienes encuentran compran a buen precio y con el servicio a domicilio”, dijo.
Además, la Central de Abasto cuenta con establecimientos de comida que son del uso para los transportistas de las frutas y verduras, empleados de las diferentes bodegas. Los comensales tienen la garantía que esos locatarios lo que cocinan y venden están elaborados con los productos que se venden en dicho mercado.