Se tiene que gestionar, manejar o diseñar este tipo de proyectos
MÉRIDA, YUCATÁN A 11 DE FEBRERO DE 2021.– La transición energética no puede ser simplemente un cambio de las fuentes de energía fósiles a las renovables, advirtió el doctor Omar Masera Ceruti, investigador del Instituto de Investigaciones en Ecosistemas y Sustentabilidad de la UNAM, Campus Morelia.
Como parte de las actividades del X Congreso de Biotecnología y Bioingeniería del Sureste, el catedrático impartió la conferencia “Hacia una transición energética sustentable: el rol de la bioenergía”, el investigador precisó:
“Lo que necesitamos es una transición a los sistemas energéticos sustentables que, a su vez, apoyan un sistema diferente de sociedad”.
El doctor Masera Ceruti comentó que este cambio será estructural para garantizar la sustentabilidad y sólo cambiar de una fuente energía a otra, pero conservando la voracidad.
“No queremos que sea simplemente lo mismo, pero con aerogeneradores o paneles, por lo que tiene que haber otra forma de gestionar, manejar o diseñar este tipo de proyectos para que sean realmente sustentables”, expuso.
Insistió en la importancia del cambio de fuentes como en la reducción en el uso de la energía, así como “un cambio de patrones para un uso sustentable de la misma”.
“Debemos trabajar para que estos nuevos desarrollos tecnológicos e investigaciones vayan por la vía del crecimiento, globalización, corporaciones, competencia hacia una sociedad donde los valores sean el consumo responsable, local, democrático, autogestivo, no violencia, equidad de género, adaptación y resiliencia”, detalló.
El ponente comentó que, actualmente, la producción del petróleo y de los hidrocarburos no se puede mantener al nivel que ha estado hasta ahora. De hecho, obtener el petróleo costará más y será complicado mantener los niveles históricos a los que estaba.
Ante la crisis climática actual, el reto mayor es reducir en un 70%, para el 2050, las emisiones de dióxido de carbono. “Es un cambio enorme en todo el sistema energético. Pero, las emisiones no sólo dependen de la energía, sino también de alimentos, la agricultura y el uso del suelo requieren un cambio civilizatorio”, precisó.
“Hay que actuar ya. Mientras más nos demoramos, más drásticos tienen que ser los cambios para evitar este calentamiento”, advirtió.
Desde el punto de vista social, el reto está romper la idea del crecimiento económico infinito como base del progreso, comentó.