A cinco años del feminicidio de Emma Gabriela, la madre sólo pide justicia. «Me están matando, me están acabando y lo peor es que la justicia no llega. La seguimos esperando», aseguró
Ligia Canto Lugo, madre de Emma Gabriela Molina Canto, mencionó que hay los elementos suficientes para que el Juzgado Séptimo de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (Prodennay) dicté sentencia para que ella se quedé con la guardia custodia definitiva de sus dos nietos.
«Pero esto no termina ahí. Tienen derecho apelar, a meter amparo directo, tienen derechos y derechos. Todo es demasiado víctimizante, demasiado estresante. Cuando al fin al cabo, terminará en lo mismo porque no hay elementos para que estás personas tengan derecho a tener acceso a los memores porque ha sido gente que los ha dañado», comentó.
Ligia Canto afirmó que, desde el inicio, hay los suficientes elementos para que se le dé la guardia custodia definitiva. «Más que nada para proteger a los menores», precisó. Además, continúa con la espera de que los Tribunales Colegiados Federales resuelvan el incumplimiento de pensión que ya lleva 10 años.
El viacrucis de Ligia Canto comenzó un 27 de marzo de 2017 cuando su hija Emma Gabriela fue asesinada de 11 puñaladas a las puertas de su casa. Previamente, la hoy víctima de feminicidio luchó durante dos arduos años por recuperar a sus hijos, quienes fueron secuestrados por el padre Alberto Medina Sonda, un político priista actualmente preso por corrupción.
Desde hace cinco años y casi dos meses, Ligia Canto ha luchado para que se haga justicia. «La verdad, yo siempre lo he dicho: “la tardanza judicial mata”. Me están matando, me están acabando y lo peor es que la justicia no llega. La seguimos esperando», señaló.
Estos años, describió, han sido terribles entre audiencias, reunir pruebas, ir a juzgados. «La verdad, es que yo no he podido hacerle luto a mi hija. Te la pasas yendo de un lugar a otro, para pedir lo que por naturaleza y justicia se te debe dar. Ahí seguimos», concluyó.