Yucatán encabeza la lista con mayor consumo per cápita de carne de cerdo, que en 2019 fue de aproximadamente de 19 kilos.
La carne de cerdo tiene numerosas propiedades para el organismo porque es magra, fuente de proteína para el crecimiento y mantenimiento del cuerpo humano, además, contiene Omega 9 que reduce el colesterol, vitaminas B1, B2, B3, B6 y B12.1
“La carne de cerdo es benéfica porque aporta numerosos nutrientes esenciales para la salud, como grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas. También provee minerales como el zinc, el potasio y vitaminas como la B y la K”, señaló el Técnico en Porcicultura Raúl García.
Las personas prefieren cortes específicos como el bistec, que representa aproximadamente el 27% del consumo de cerdo, la costilla y chuleta con 26.3%. La carne de cerdo es una de las principales fuentes de proteína para la población.
Una buena dieta debe ser variada y con todo tipo de nutrientes. La carne de cerdo es una excelente opción, pues hay cortes magros como el lomo, filete y solomillo, que cuentan con bajos niveles de grasa.
Los productores porcícolas cuentan con certificaciones que cumplen con estrictas medidas de higiene y seguridad. La carne de cerdo tiene digestibilidad del 90%, alta en comparación con otros alimentos. Las personas mayores pueden elegir cortes magros si quieren reducir la grasa y asegurarse de que podrán digerirla.
La carne de cerdo aporta altos niveles de potasio y una mínima cantidad de sodio, por lo que es segura para las personas con hipertensión. Para aquellos que deben alimentarse cuidando el colesterol, también, es buena alternativa, pues por cada 100 gramos de carne hay entre 45 y 50 miligramos de colesterol. Es importante consumir carne fresca con la correcta manipulación del producto y una cocción y preparación adecuadas para evitar cualquier problema.
Los productores porcícolas mexicanos realizan un enorme esfuerzo para llevar a la mesa carne de cerdo de la más alta calidad y con las mayores medidas de seguridad, concluyó Raúl García.