A través del Movimiento HAGAMOS RUIDO CONTRA EL RUIDO, integrado en forma espontánea por vecinos unidos, denunciaron que existen por lo menos 600 quejas contra altos niveles de ruido en los cuatro puntos de la ciudad, sobre todo en bares, cantinas, centros nocturnos e incluso parques.
En el marco del día internacional de la conscientización contra el ruido que se ha vuelto un problema en las ciudad grandes, dicho grupo de vecinos alzaron la voz y destacaron algunos de los casos que todavía no han tenido respuesta.
Una de las afectadas de nombre, Carmen May, resaltó que hace más de 10 años ella y su familia han luchado para que un bar cercano a su casa le baje a su sonido, debido a que esto les ha traido consigo muchos problemas de estrés y ansiedad.
Recalcó que desde el 2019, fecha en que se realizó el ajuste al reglamento municipal se han presentado 625 quejas, esto en las oficinas del departamento de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento de Mérida. Reglamento que ellos consideran se encuentra muy lejos de promover buena salud y costumbres.
Otra de las vecinas, en éste caso del rumbo de Chenkú, Ligia Bolio, denunció que cerca de su casa se encuentra un campo deportivo en el que incurren malas prácticas pasadas las 9 de la noche. “Esas son las horas en las que se les ocurre realizar sus partidos. Tenemos que estar escuchando a desahoras de la noche, malas palabras, silbatazos, ingesta de bebidas alcoholicas e incluso fecalismo al aire libre”, dijo.
HAGAMOS RUIDO CONTRA EL RUIDO es un movimiento integrado por yucatecos y extranjeros del entorno social, cultural y vecinos hartos con las malas prácticas de los bares. Quienes se dicen disfrutar activamente las expresiones artísticas y pagar puntualmente impuestos y servicios, es decir, son activos participantes de la vida comunitaria, en los cuatro puntos cardinales de Mérida, incluyendo sus numerosas comisarías.
Antecedente importante en el procurar una vida colectiva saludable libre de Ruido ha sido la agrupación «Todos Somos Mérida», con intensa actividad entre 2017 y 2020, que impulsó la visibilización de la problemática y la actualización del Reglamento de Protección al Ambiente y del Equilibrio Ecológico del Municipio de Mérida en 2019, así como es importante referir que hay personas y grupos que han concretado denuncias desde 1974 y más numerosas y formales desde 2004 y en medida creciente desde 2013.
A modo de ejemplos de diferentes facetas de la problemática hoy se exponen con detalle, en forma anexa, las graves situaciones que generan vecinos prepotentes y/o inconscientes, el uso abusivo y carente de reglamentación y de supervisión institucional de espacios verdes públicos, así como de fuentes fijas tales como cantinas, bares, antros, talleres y comercios de todo tipo. Yucatán tiene el antepenúltimo lugar en manejo sustentable del medio ambiente (Instituto Mexicano de la Competitividad).
Aquí también cabe referir que los resultados de la encuesta “Población de 18 años o más con conflictos o enfrentamientos-Primer trimestre de 2023″…indica como la mayor causa de conflictos, entre vecinos, en el país, es el RUIDO.
“Expresamos con la mayor claridad que estamos a favor de la música, la diversión, la bohemia, el esparcimiento, así como el trabajo en todas sus modalidades, el comercio y la industria socialmente responsables y la vida económica general del estado y de la ciudad de Mérida, siempre dentro de los marcos urbanístico y jurídico”, comentaron.
Consideran que los/las trabajadores/as de comercios, servicios e industrias donde hay elevados niveles de RUIDO son un sector fundamental que se encuentra desprotegido y en grave riesgo, aun cuando hay disposiciones legales precisas que no se respetan. Aquí también percibimos negligencia de comerciantes y autoridades.
Hicieron un llamado en resaltar la importancia de contar en el estado con problemas como el RUIDO y las vibraciones, es una cuestión de Salud Pública, salud auditiva, salud física y salud mental, en el presente y sobre todo en un futuro próximo. Yucatán es el segundo lugar a nivel nacional por pérdida auditiva y una de las principales razones es la exposición constante al RUIDO (Dr. Luis Aguayo Martín, responsable del gabinete de audiología del HRAE)
Asimismo resaltaron que, desde hace unas semanas, nos asesora y promueve de manera gratuita y comprometida, el Abogado Erik Pérez Loyo y ya se han interpuesto denuncias ciudadanas ante la Dirección de Desarrollo Urbano municipal, denuncias penales ante la Fiscalía del Estado y amparos ante la Justicia Federal.
“Cabe señalar que el Código Penal del Estado sí tipifica delitos contra el medio ambiente, entre los que precisa ruido y vibraciones, en su Art. 201. Asimismo, otro recurso no promocionado y por ello no conocido y usado, es la figura del Juez Cívico de todo Ayuntamiento”, agregaron.