Durante 38 años el tratamiento con ácido acetilsalicílico de baja dosis en pacientes con riesgo cardiovascular elevado y con enfermedades cardiovasculares establecidas es considerado la piedra angular, pues el medicamento fue incluido en 2019 en las guías de la American Heart Association para la prevención primaria en pacientes de 40 a 70 años», manifestó el Cardiólogo Alexis Gómez.
En pacientes con riesgo elevado, el ácido acetilsalicílico de baja dosis o aspirina reduce 23% el riesgo de un primer infarto agudo de miocardio y en 31% de un segundo, además, disminuye el riesgo de un evento vascular cerebral isquémico recurrente en 22%.
Para los pacientes que tuvieron un evento cardiovascular, las medidas de prevención secundaria son fundamentales para hacer más lenta la progresión de su enfermedad, para evitar la aparición o complicaciones.
El uso de la aspirina tiene papel central para prevenir la recurrencia de eventos cardiovasculares mayores y la muerte cardiovascular, con la reducción del 12% y 9%, respectivamente, siendo el fármaco de primera elección, según las guías de práctica clínica internacional.
Esos resultados alentadores fueron posibles por la adherencia al tratamiento, solo así los pacientes podrán obtener mejor esperanza de vida, siguiendo las instrucciones de su médico, resaltó el especialista.
La falta de adherencia terapéutica es un problema de impacto mundial, predominando, sobre todo, en pacientes con enfermedades crónicas, en las cuales, el cumplimiento del tratamiento en la dosis indicada comprende más del 50%.
“A lo largo de los años, la adherencia al tratamiento se posiciona como un problema de salud pública. Necesitamos hacer hincapié en eliminar las barreras de adherencia terapéutica para transformarlas en un componente central de los esfuerzos entre todos los actores involucrados, para mejorar la salud de la población mexicana y prevenir eventos cardiovasculares”, concluyó Alexis Gómez.