
«Yo prefiero que sea la gente de la calle, y no los acuerdos de la cúpula», opinó el diputado local

Con el propósito que el PRI resurja fuerte con miras a las elecciones de 2024, la nueva dirigencia estatal tiene que ser electa de un proceso abierto, que la decisión sea tomada por la militancia, pues no coincide con los acuerdos de la cúpula y que el dedazo es lo mejor para la unidad del partido, comentó el diputado priista Gaspar Quintal Parra.
«Yo prefiero que sea la gente de la calle, de las bases, seccionales, los liderazgos de las colonias, comisarías y municipios los que decidan el rumbo que debe tomar el partido», señaló el también coordinador de la Fracción Parlamentaria del PRI en el Congreso del Estado.
En abril del próximo año, concluye la gestión de Francisco Torres Rivas, al frente del Comité Directivo Estatal del PRI. Por tal motivo, el 2023 «es un año de competencia y en el cual se tienen las posibilidades de organizarse bien para tener buenos resultados en las elecciones del 2024».
Aunque no se descarta para contender a dicho cargo, mientras continúe vigente y tenga salud, Quintal Parra mencionó que por el momento trabaja en tener una buena coordinación de la bancada legislativa, cumpliendo con la agenda que se ha presentado.
–El ser presidente del PRI Yucatán es una responsabilidad muy alta y soy un hombre de retos. Me gustan los retos y se tiene un reto muy importante en el 2024 –comentó.
En 2007, cuando presidió el Comité Municipal del PRI, la entonces candidata del Revolucionario Institucional a la gubernatura ganó en la capital yucateca y el candidato a la alcaldía se quedó a mil votos de la victoria.
Para 2010, la arquitecta Angélica Araujo Lara ganó la presidencia municipal de Mérida por primera vez después de 20 años, que los gobiernos municipales emanaban de Acción Nacional. «Es por eso que es importante asumir las responsabilidades», afirmó.
Aunque es válido que le apuesten a la oportunidad, y donde se las den que las agarren, el PRI debe preferir la capacidad. «Que algún día nos gobiernen los capaces y no los oportunistas», afirmó.
En 2024, el PRI tiene que hacer una buena selección de candidatos y candidatas, y permitir una apertura en la cual nuevos cuadros y una nueva generación tome la batuta del PRI.
De las candidaturas, pues se tiene una generación de 41 alcaldes que promedian los 35 y 40 años de edad, que son quienes pueden renovar al partido.
Pero no es un asunto de edad, «si no de actitud y principios de no generar autoritarismo y si apertura privilegiando la capacidad intelectual, de liderazgo y social».
En otro tema, el asambleísta local señaló que la asignatura pendiente en el PRI es la rendición de cuentas de qué hicieron con la oportunidad que se le dio y que la militancia pueda valorar si ese funcionario los representa.
Al ser cuestionado sobre la ampliación de mandato del diputado Alejandro Moreno Cárdenas en el Comité Ejecutivo Nacional, Quintal Parra señaló que se hizo una reforma a los estatutos, en los cuales se establece que el presidente del partido puede solicitar una prórroga de 90 días hábiles al periodo que fue electo y anteriormente lo que decía es que eran días naturales.
«Me parece el que sostener que se va a prorrogar y que se quiere quedar eternamente en la presidencia del partido son solo pretextos de dos o tres elementos que quisieron manejar el PRI, siempre entre ellos, Miguel Ángel Osorio Chong que está buscando una justificación para su próximo proceder», dijo.