«No hay claridad respecto a quien supervisará que la integración de la lista de votantes sean objetivos, apartidistas y transparentes», señaló la Dirección Ejecutiva Federal de Electores del INE
La reforma electoral representa un regresión, pues la iniciativa enviada por el gobierno federal a la Cámara de Diputados plantea que el padrón electoral esté en manos de la Secretaría de Gobiernación (Segob), señaló el director ejecutivo del Registro Federal de Electores del INE, René Miranda Jaimes.
«No hay claridad respecto a quien supervisará que la integración de la lista de votantes sean objetivos, apartidistas y transparentes. Me parece que es importante señalar que no puede haber elecciones confiables sin un padrón confiable. Y esto, ya lo tenemos resuelto hoy», mencionó el funcionario electoral.
En caso de aprobarse la reforma constitucional en material electoral, comentó, un posible escenario sería la construcción de la lista de votantes sin necesariamente contar con los mecanismos de vigilancia y transparencia.
Hoy día, para la elaboración del padrón electoral se cuenta con la Comisión Nacional de Vigilancia, 32 comisiones locales de Vigilancia y 300 comisiones distritales de vigilancia. A su vez, las comisiones están formadas por los partidos políticos y la autoridad electoral, detalló.
«Ya lo han dicho destacados miembros del gobierno federal, que sí quieren llevarse el padrón electoral», dijo el ingeniero Miranda Jaimes.
El entrevistado cuestionó cuál es la razón de retomar un modelo que ya se vivió hace 30 años y que lo único que generaba eran «dudas y suspicacias». «No olvidemos que venimos de un modelo electoral, que el gobierno en turno gestionaba el padrón electoral y era modelo de desconfianza y todos partidos de oposición siempre pugnaron y pelearon que el Padrón Electoral no estuviera en manos del gobierno, por eso se construyeron acuerdos, leyes e instituciones», recordó.
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