Experto señaló que no se aplica el protocolo de feminicidio en suicidios de mujeres
En lo que va de 2022, se han reportado tres feminicidios. Pero, es muy preocupante que la cifra de suicidios en mujeres sea muy alta y que no se investigan como suicidio-feminicidio, señaló Adelaida Salas Salazar, representante del Observatorio Ciudadano Nacional de Feminicidio.
También, añadió, es grave el aumento de los casos de tentativa de feminicidio que llegan al Hospital General Agustín O’Horán, que no quedan registrados en el banco de datos del programa prioritario para salvar vidas de la Secretaría de las Mujeres (Semujeres).
«Cuando una víctima llega en un estado delicado, se supone que el Ministerio Público debe acudir al nosocomio para levantar una denuncia, pero no es así. Según personal médico del O’Horán, cuando una mujer llega a punto de morir, se cura y se salva. Entonces, agentes del Ministerio Público se presentan para preguntar si quiere denunciar, muchas de las mujeres dicen que no», explicó.
De acuerdo con datos del INEGI, citados por la activista, hasta el 9 de septiembre, Yucatán ocupaba el segundo lugar nacional en suicidios con 342 víctimas. Pero, la cifra contrasta con los 252 (incluidos los dos más recientes) proporcionados por el gobierno del Estado.
Pero el Observatorio ha cotejado 47 mujeres suicidadas en lo que va 2022; 49, en 2020, y 62 en 2021. «Desde 2020, familiares de víctimas de suicidio nos han buscado porque hay indicios que no fueron suicidios, sino feminicidio porque hay un entorno de violencia y que algo ahí no está bien», describió.
Un ejemplo de lo anterior es el caso de una joven, quien vivió con su madre y tía, no tenía problemas y fue hallada sin vida, en la sala de su casa y con la hamaca en el cuello.
Adelaida Salas mencionó que, ante los casos de muertes violentas de mujeres, la Fiscalía General del Estado (FGE) no han activado los protocolos de feminicidios, porque consideran que esos suicidios no son muertes violentas. «A insistencia nuestra, han empezado darle importancia», expresó.
Por su parte, el criminólogo David Rivera comentó que, tras una investigación realizada, se detectó que la aplicación del protocolo de feminicidio no se aplica en suicidios de mujeres. «Se observan una variedad de procesos, estudios y evaluaciones que no fueron aplicados a lo largo de la investigación y por tanto no cumplieron con las tres áreas del protocolo: historia de vida y entorno social, analizar los perfiles de personalidad de la víctimas y posibles victimaros y analizar la conducta criminal», explicó.
Reiteró que toda muerte violenta de una mujer, aunque sea suicidio, tiene que aplicarse el protocolo de feminicidio.
A la falta de la aplicación del protocolo, hay que añadirle que la mayoría de los estados han reducido la inversión en adquirir nuevos equipamientos de investigación. «La búsqueda de justicia empieza a trabajar con procesos rezagados de tecnología», señaló.
Y en el caso de los Ministerios Públicos, sólo buscan judicializar los casos para dar el carpetazo y no tienen interés alguno en realizar la investigación. «En todos los ejercicios de justicia, se van a los mínimos necesarios. Desgraciadamente, en la capacidad de investigación de las fiscalías en México, en cuanto a policías periciales, los recursos se disminuyeron a nivel federal», dijo.
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