Ante la polémica surgida en redes sociales por el rediseño de la Plaza Grande, donde quitaron las bancas de estilo colonial para ser sustituidas por unas de diseño moderno, el alcalde Alejandro Ruz Castro defendió el proyecto, pues el resultado de la obra será un espacio público “muy bonito, funcional, con nuevas áreas y ornamentación”.
“Siempre, un proyecto genera mucha expectativa y quedará muy bien. Estaremos acompañando al gobernador (Mauricio Vila Dosal) en la supervisión y verificación de estas obras”, comentó el primer edil, quien respaldó la modernización e innovación de los espacios públicos del Centro Histórico.
Pero, al preguntarle sobre el paradero de las bancas de madera y los confidentes, que ha sido lo más comentado en redes sociales, el primer edil mencionó que todavía no sabe dónde serán colocadas.
–¿Le gustó el rediseño de la Plaza Grande, alcalde? –se le cuestionó al concejal, a lo que respondió: “Sí, me gustó”.
En defensa de la polémica remodelación, Ruz Castro aseguró que se conservarán las bancas, los confidentes, se mejorará el alumbrado y, en colaboración con la Unidad de Desarrollo Sustentable, se retiraron los algunos árboles que representaban un riesgo para la ciudadanía e impedían la movilidad en las rampas para las personas con discapacidad.