Una reglamentación municipal implementada hace dos años ha permitido al municipio recuperar un total de 400 bóvedas en el Cementerio General. Esta normativa exige a los propietarios de tumbas ratificar cada tres años su titularidad y su uso continuado del espacio.
José Collado Soberanis, titular de la Dirección de Servicios Públicos Municipales, destacó que esta regulación ha transformado las concesiones perpetuas de las tumbas en concesiones temporales. Los propietarios ahora deben acercarse al municipio cada tres años para confirmar su intención de seguir utilizando el espacio.
Gracias a esta medida, la administración actual ha logrado rescatar 400 bóvedas. De estas, 200 ya están disponibles para quienes necesiten una tumba en el Cementerio General. Las otras 200 se someterán a un proceso de limpieza y rehabilitación con una inversión de un millón de pesos.
Collado Soberanis explicó: «Este es el resultado de la colaboración con los ciudadanos que ya no requerían la bóveda y nos pidieron que realizáramos el entierro (del difunto) para liberar el espacio. Nos encargamos de limpiar y rehabilitar toda el área y la ponemos a disposición de cualquier ciudadano que la necesite».
El funcionario municipal también informó que el municipio está trabajando en la modernización de los cementerios, incluyendo la instalación de nomenclaturas en estos espacios para facilitar la identificación de tumbas. Esto permitirá a las familias localizar las bóvedas más fácilmente a través de la nomenclatura y la información digitalizada.
«Con los planos que hemos digitalizado, abrimos los libros para ubicar las tumbas con el nombre del difunto, lo que agiliza la búsqueda. Todos los cementerios de Mérida están digitalizados, y estamos expandiendo este sistema a las comisarías, donde es más sencillo porque la gente conoce la ubicación de sus seres queridos», añadió Collado Soberanis.