Ante una nutrida de jóvenes y maestros, en el marco de la FILEY, el maestro Rogerio Castro Vázquez presentó su primer libro “Del pueblo para Yucatán” que narra su historia de vida y entrelaza cronológicamente con sucesos de la política local y nacional, y en la cual muestra que con constancia y preparación se puede alcanzar objetivos de vida que se canalicen al servicio a la sociedad.
La obra, que tiene el respaldo de Lectámbulos, es considerado un ensayo político, explicó la directora de esta casa editorial, Verónica García Rodríguez, quien agregó que ver nacer un libro es un motivo de alegría, ya que quien escribe plasma sus ideas y deja un legado para las futuras generaciones.
En su turno al habla, el maestro Rogerio agradeció la presencia de su familia y el respaldo de tantos amigos que llegaron de diversos puntos del estado y de país, ya que esta obra representa el esfuerzo de poco más de un año de reflexiones y trabajo duro que realizó muchas veces en sus trayectos por carretera o en avión entre sus encomiendas laborales o a altas horas de la noche cuando terminaba en la oficina.
“Desde que tengo memoria fui un chico muy extrovertido, por lo que decidí demostrar mi sentir mediante cartas y recados. Fue así como fui perfeccionando la técnica e incluso conquistando a las chicas que me interesaban”, contó.
Precisó que decidió contar su historia, aunque es una persona joven con 39 años de edad, para mostrar que su vida es como la de cualquier yucateco que tiene sueños y aspiraciones para mejorar y que también tiene el ideal de trabajar en favor de su gente. «Estoy muy contento porque para mí no hay nada más importante que el pueblo, por eso muchas, muchas gracias. Gracias a los morenistas y a los obradoristas».
“Todo mundo puede hablar y decir que fui una persona con suerte, pero nadie se dio cuenta que desde mi niñez padeció el tener que moverme en bicicleta largos trayectos”, dijo.
El también titular del Infonavit comentó con los jóvenes su historia de vida y como pese a tener todo en su contra pudo salir adelante para terminar una carrera y además estar sirviendo al pueblo, desde su trinchera en el infonavit.
Por último, Rogerio Castro compartió con los jóvenes en una firma de libros para aquellos que se quedaron con la intención de compartir alguna anécdota con el maestro.