Entrega títulos de la colección “21 para el 21”, con el objetivo de fomentar dicha actividad
Mediadores de lectura de 142 salas donde se promueve el gusto por las letras, recibieron libros de la colección “21 para el 21”, dentro del objetivo del Gobernador Mauricio Vila Dosal, de incentivar el conocimiento de importantes autores entre la ciudadanía.
En la actividad, que encabezó la titular de la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta), Loreto Villanueva Trujillo, se entregó el acervo a voluntarios del Programa Nacional de Salas de Lectura (PNSL), que han recibido capacitación a distancia por parte de la dependencia estatal.
La funcionaria agradeció la participación de los mediadores, cuya labor ayuda a cumplir la misión de extender el placer por leer, además de acercar la magia de la literatura a niñas, niños, jóvenes, personas adultas y mayores, con cientos de historias que amplían su conciencia, creatividad y felicidad.
Las obras otorgadas provienen del Fondo de Cultura Económica y fueron editadas para conmemorar 700 años de la fundación de México-Tenochtitlán, 500 de la invasión extranjera y 200 de la Independencia del país, y se distribuirán en más de 100 espacios y círculos de lectura activos en la entidad.
Para Ledy Diana Sarabia Gamboa, mediadora de la Sala de Lectura del Centro Especializado en la Aplicación de Medidas para Adolescentes (Ceama), contar con este acervo es importante para la tarea de los responsables de cada sitio, que muchas pasa inadvertida; estas acciones permitirán que más gente conozca a grandes escritores y, sin libros, la situación sería más difícil, comentó.
Mirza Herrera Salazar, del espacio denominado Michm, de Kanasín, expresó que los nuevos títulos le servirán para motivar de nueva cuenta a las personas que, debido a la pandemia, se habían apartado, mientras que, para Daniela Tarhuni Navarro, de la Sala Navegantes, de Mérida, esto generará un efecto cascada, pues se podrá compartir estos textos fuera de los círculos habituales.
Se distribuirá esta colección en las 142 sedes de este tipo, 57 de las cuales se encuentran en el interior del estado, 85 en la capital y 15 operan en lengua maya, con la finalidad de ampliar las opciones que tendrán los usuarios que acudan a cada una.
Incluye La revolución de Independencia, de Luis Villoro; Canek, de Emilio Abreu Gómez; Balún Canán, de Rosario Castellanos; El libro rojo de la Independencia, de Manuel Payno y Vicente Riva Palacio; La breve historia de la guerra con los Estados Unidos, de José C. Valdés; Tomóchic, de Heriberto Frías, e Y Matarazo no llamó…, de Elena Garro.
También, Tiene la noche un árbol, de Heriberto Dueñas; Muerte en el bosque, de Amparo Dávila; Río subterráneo, de Inés Arredondo; Los de abajo, de Mariano Azuela; El libro vacío, de Josefina Vicens; Noticias biográficas de insurgentes apodados, de Elías Amador, y El laberinto de la soledad, de Octavio Paz.
Finalmente, Apocalipstick, de Carlos Monsiváis; Pueblo en vilo, de Luis González y González; Paseo de la Reforma, de Elena Poniatowska; Crónicas de amor, de historia y de guerra, de Guillermo Prieto; La sombra del caudillo, de Martín Luis González; Tiempo de ladrones, de Emilio Carballido, y Antología de poesía mexicana del Siglo XIX.