La directora de la Unidad de Desarrollo Sustentable del Ayuntamiento de Mérida, Alejandra Bolio Rojas, expresó preocupación por los desafíos en el reciclaje de vidrio en Yucatán, ya que no hay una industria local que procese este material ni las pilas, a pesar de los puntos verdes existentes en la ciudad.
Bolio Rojas señaló que la única acción local viable para el vidrio es triturarlo para reducir su volumen, enviándolo luego a plantas en el centro del país que sí cuentan con la infraestructura para fundirlo. Lamentablemente, en la región sureste no hay plantas procesadoras de vidrio, y la colecta de este residuo se realiza en colaboración con empresas aliadas que facilitan su transporte hacia lugares de trituración.
La directora destacó que la instalación de una planta procesadora de vidrio requiere una gran capacidad de suministro y una infraestructura específica de materiales minerales. La viabilidad de este tipo de industria en la región depende de las condiciones que el sector industrial considere para establecerse.
Mientras tanto, para otros materiales reciclables como plástico, aluminio, cartón y HDPE, se tiene un convenio con la empresa Bepensa, a través de su planta, para realizar el reciclaje total de estos residuos. Sin embargo, el reciclaje de pilas implica su salida del estado, gestionándose a través de empresas autorizadas por la Semanart para el manejo de residuos peligrosos y destinándose a sitios de disposición final autorizados fuera de Yucatán. La directora enfatizó la importancia de explorar futuras soluciones, incluida la posibilidad de atraer industrias de reciclaje a la región sureste.