Los estudios clínicos con hidroxicloroquina para el manejo de Covid-19 ocasionó el desabasto del medicamento en México y puso en riesgo el tratamiento de los pacientes que usan la terapia históricamente para artritis reumatoide, lupus eritematoso sistémico y malaria o paludismo.
La hidroxicloroquina es un medicamento que como parte de de sus diversos mecanismos de acción, tiene efectosantivirales e inmunomoduladores, por lo cual, se investiga como tratamiento contra los síntomas de la enfermedad que causa el Covid-19, dijo el Dr. Antonio Loaeza.
Aunque la información es alentadora ante el embate mundial de la pandemia, no hay suficiente evidencia científica que confirme que la hidroxicloroquina, se pueda usar con seguridad y eficacia para tratar a los pacientes con Coronavirus.
La artritis reumatoide y el lupus eritematoso no tienen cura, solo es posible controlar sus síntomas por medio de un tratamiento permanente.
Si un paciente deja de tomar su medicamento puede presentar recaídas o una progresión de la enfermedad, con daño a los órganos y/o articulaciones, explicó.
Al comprar sin prescripción médica la hidroxicloroquina, la demanda del producto aumentó y generó desabasto, que pone en riesgo a los pacientes que necesitan el medicamento para tener buena calidad de vida.
Además, los pacientes que se automedican ponen en riesgo su salud, al enfrentarse a efectos secundarios que requieren de supervisión médica regular, abundó el Dr. Loaeza.
Durante la pandemia, los pacientes con enfermedades crónicas como artritis reumatoide o lupus, deben estar más protegidos para evitar que en caso de ser contagiados con el virus, su condición no llegue a estado crítico.
Los laboratorios químicos redoblaron esfuerzos para los pacientes que sufren de artritis reumatoide, lupus o malaria, reciban el medicamento en casa durante la contingencia.